La Salud como Fuente de Bienestar: Una Reflexión en el Día Mundial de la Salud
- mariajosemndieteti
- hace 4 días
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Cada 7 de abril se celebra el Día Mundial de la Salud, una fecha proclamada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que invita a reflexionar sobre la importancia de cuidar nuestro cuerpo y mente como base para una vida plena. Este año, más que nunca, hablar de salud no solo implica pensar en la ausencia de enfermedad, sino en la construcción activa del bienestar integral.
Como dietista, vivo de cerca el impacto que tiene la alimentación en la salud de las personas. A diario acompaño procesos de transformación en los que mis pacientes descubren que cuidar su cuerpo no es una imposición, sino un acto de amor propio. A través de la nutrición, se abren puertas a una vida más energética, equilibrada y feliz.
Salud: más que un diagnóstico, un estado de bienestar
La OMS define la salud como “un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. Esta definición, lejos de ser una frase teórica, cobra cada vez más fuerza gracias a estudios recientes que demuestran cómo la salud está profundamente conectada con nuestra calidad de vida.
Uno de los campos que más ha avanzado en los últimos años es el de la nutrición y el microbioma intestinal. Investigaciones como las publicadas en Nature Reviews Gastroenterology & Hepatology (2023) confirman que la salud intestinal impacta no solo en la digestión, sino en nuestro sistema inmune, el estado de ánimo e incluso en la prevención de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, el Alzheimer y algunos tipos de cáncer.
Como dietista, esto refuerza una convicción que comparto con cada persona que atiendo: lo que comes sí importa, y puede ser una de tus herramientas más poderosas para cultivar salud y bienestar.
La nutrición como medicina preventiva
Una alimentación equilibrada, basada en alimentos frescos, variados y adaptados a cada individuo, es hoy reconocida por la ciencia como uno de los pilares fundamentales para una vida saludable.
Estudios como el publicado en The Lancet (2024) sobre los “patrones dietéticos protectores” revelan que dietas como la mediterránea, ricas en frutas, verduras, grasas saludables, legumbres y cereales integrales, pueden reducir en más de un 30% el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Además, se asocian con mejor salud cognitiva, mayor longevidad y bienestar emocional.
Pero la alimentación no lo es todo. La salud se construye desde un enfoque multidimensional. Por eso, siempre invito a mis pacientes a observar su estilo de vida en conjunto: ¿cómo estás durmiendo?, ¿te estás moviendo lo suficiente?, ¿qué espacio le das a tu descanso mental y emocional?
Salud mental y alimentación: una conexión profunda
En los últimos años, la ciencia ha puesto sobre la mesa otra realidad innegable: nuestra salud mental está directamente relacionada con la salud física. El término "psiconutrición", por ejemplo, se ha vuelto común entre profesionales que integramos la nutrición y el bienestar emocional como un todo.
Un estudio de 2024 realizado por la Universidad de Harvard muestra que una dieta rica en alimentos ultraprocesados está asociada con un mayor riesgo de depresión, ansiedad y trastornos del sueño. Al contrario, una dieta rica en triptófano (presente en alimentos como huevos, lácteos, plátanos y legumbres) puede favorecer la producción de serotonina, conocida como la hormona del bienestar.
Desde mi práctica como dietista, estos datos reafirman la necesidad de un enfoque personalizado, empático y libre de culpa. Comer bien no debe vivirse como una obligación, sino como un acto de autocuidado. Porque cada bocado tiene el poder de transformar.
La prevención es el futuro de la salud
Más que curar enfermedades, el enfoque actual y futuro de la salud apunta hacia la prevención activa. Y esto comienza en casa, en nuestras decisiones diarias, en cómo gestionamos el estrés, en la actividad física que incorporamos, y por supuesto, en lo que ponemos en nuestro plato.
Como profesional de la salud, mi propósito no es imponer dietas, sino educar, acompañar y motivar a las personas para que descubran su propio camino hacia el bienestar. La salud no es una meta estática, sino un proceso dinámico, que se construye con amor, conocimiento y compromiso diario.
7 de abril: una oportunidad para reconectar
Hoy, Día Mundial de la Salud, te invito a detenerte un momento y preguntarte:¿Cómo está tu salud? ¿Cómo estás tú?
Tal vez este sea un buen momento para retomar ese hábito olvidado, para pedir ayuda profesional si la necesitas, o simplemente para escuchar a tu cuerpo con más atención y compasión.
Porque cuidar de tu salud es cuidar de ti, de tu presente y de tu futuro.Y como dice un viejo proverbio: “Quien tiene salud, tiene esperanza; y quien tiene esperanza, lo tiene todo.”
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